domingo, 25 de marzo de 2012

Fuentes

taller de periodismo digital "¿Que es una crónica?". Recuperado el día 24 de marzo del 2012 de: http://periodismoreporte.blogspot.mx/2006/08/qu-es-una-crnica.html

El primer encuentro entre españoles e indígenas "Extracto del Diario de abordo de Cristobal Colon". Recuperado el día 24 de marzo del 2012 de : http://usuarios.advance.com.ar/pfernando/DocsIglLA/Colon-indigenas.htm

Youtube "El descubrimiento de América". Recuperado el día 24 de marzo del 2012 de : http://www.youtube.com/watch?v=9VQFRC-2U3M

cabecera de arte historia "historia general de las cosas".Recuperado el día 25 de marzo del 2012 de:
http://www.artehistoria.jcyl.es/cronicas/contextos/10945.htm


Cartas de relacion de Hernan Cortes de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Cartas_de_relaci%C3%B3n


Brevisima relacion de la destruccion de las Indias de:
http://www.ciudadseva.com/textos/otros/brevisi.htm

Fray Bernandino de Sahagún: Historia general de las cosas de la Nueva Esaña

Ocho años después de la conquista de México-Tenochtitlan (1521) desembarcaba en la costa oriental de lo que entonces se llamó Nueva España un grupo de diecinueve misioneros franciscanos bajo la dirección de fray Antonio de Ciudad Rodrigo, entre los que se encontraba fray Bernardino de Sahagún. No fue ésta la primera expedición de franciscanos; cinco años antes (1524), y al cargo de fray Martín de Valencia, había llegado el famoso grupo de los "doce apóstoles" como consecuencia de las decisiones del Emperador con respecto a una de las peticiones que Cortés había incluido en sus Cartas de Relación. El mismo Sahagún, entre otros, dejó constancia de ello:

Pues haviendo este gran capitán [Cortés] conquistado y pacificado esta tierra llena de gente de gran policía y muy sabia en el regimiento de su república, y muy exercitada y diestra en el arte militar (que ellos usavan) y muy servidora y reverenciadora de sus ídolos, dio luego noticia al muy cristianíssimo Emperador Carlo, quinto de este nombre, Rey de las Españas, el cual, como cristianíssimo, luego dio relación al Sumo Pontífice, León 10, de todo lo que pasava y le suplicó provey[e]se de personas idóneas que entendiesen en la conversión de aquellos gentiles idólatras (Coloquios y Doctrina Cristiana, fol. 26v, reproducción facsimilar en Vicente Castro y Rodríguez Molinero 1986: 260).

La muerte de León X hizo que la decisión recayese en su sucesor Adriano Sexto. Otros franciscanos llegaron antes o entre estas dos expediciones, ya que en un documento citado por Chavero (1948: 8), uno de los principales biógrafos de Sahagún, aparece éste ocupando el número 43 entre los frailes de la misma orden que habían llegado a México. Por su parte fray Gerónimo de Mendieta en su Historia eclesiástica indiana (1971: 187) nos informa que, incluso con anterioridad a los "doce", habían ya llegado los flamencos Juan de Tecto, Juan de Aora, Pedro de Gante y Joan Clapion, y el español Francisco de los Ángeles.
Poco es lo que se sabe de la vida de fray Bernandino antes de su llegada al Nuevo Mundo. Se desconoce con exactitud la fecha de su nacimiento, si bien se supone que tuvo lugar en 1499 o 1500, en Sahagún de Campos, León. La datación está basada exclusivamente en la información, indirecta al caso, que se encuentra en el prólogo a la Historia general de las cosas de Nueva España (en adelante HGCNE) y en el del Libro II, donde se dice que: "Estos doze libros ... se acabaron de sacar en blanco este año de mil e quinientos y sesenta y nueve" (Prólogo), y que en ese año él "era mayor de setenta años" (Prólogo al Libro II). El historiador ya mencionado, hermano de orden y casi contemporáneo de Sahagún, afirma que acabó "sus días en venerable vejez, de edad de más de noventa años ... el año de mil y quinientos y noventa ..." (1971: 664). En cuanto al lugar de nacimiento y orden profesada, la declaración del propio Sahagún constituye la biografía más exacta, si bien escueta, del periodo anterior a su paso a las Indias: "yo, fray Bernardino de Sahagún, fraile professo de la Orden de Nuestro Seráphico Padre San Francisco, de la observancia, natural de la Villa de Sahagún, en Campos..." (Prólogo).
Chavero (1948: 7) menciona en su obra, originalmente publicada en 1877, que el patronímico de fray Bernardino fue "Ribeira", sin ofrecer prueba alguna. Desde entonces, con algunas reservas, se ha venido aceptando, a pesar de no haberse descubierto ningún documento que lo confirme.
El padre Ángel María Garibay es el primero, que yo sepa, que alude al posible origen converso de la familia de Sahagún: "Hay vehementes sospechas de que fuera de una familia de judíos conversos." Y añade: "Es uno de los puntos que deben aclararse." (1975: 12). Munro S. Edmonson parece retomar esta alusión para indicar que: "Without [...] documentation, even informed guesses -such as speculation that he may have come from a converso Jewish family- have no utility for appraising the preparation he brought to his work in the New World." (1974: 2). No obstante, en uno de los últimos escritos monográficos dedicados a Sahagún, sus autores (Vicente Castro y Rodríguez Molinero 1986: 23) indican que: "Quizás [Garibay] lo haya estrapolado un poco al encontrar en el prólogo del Vocabulario Trilingüe estas palabras: 'Va en romance toda esta gramática histórica: Ne dedisse videamur ansam rabinis, qui saepe expugnaverunt me a juventute mea'." Y añaden a pie de página su traducción de la cita latina: "No parezcamos dar ocasión a los Rabinos, que con frecuencia me atacaron desde mi juventud." Más adelante los mismos autores vuelven a insistir en este aspecto, al tratar de establecer un paralelo con San Francisco de Asís. En una nota para aclarar su opinión de que Sahagún provenía de una familia acomodada dicen: "No sabemos ciertamente si a familia de judíos poderosos, o a comerciantes adinerados. En todo caso el paralelismo con San Francisco de Asís que también insistentemente fue perseguido por su padre es claro cuando nos dice que los rabinos le persiguieron desde su juventud." (ibid., 49-50).
No sé si Vicente Castro y Rodríguez Molinero tendrán razón al sugerir que Garibay se basase para su declaración en la cita latina ofrecida del Vocabulario Trilingüe. De lo que no tengo duda es que dicha referencia no puede ni debe ofrecerse como dato para especular sobre el origen de Sahagún y su familia. En primer lugar la cita aparece recogida sólo por Torquemada (1943: XX, xlvi); la obra, una de las últimas de Sahagún, en que se supone estuviese la cita, no nos ha llegado; y, sobre todo, a la palabra rabinis de ninguna forma se le puede atribuir el significado de "rabinos" que se le ha dado, sino más bien, como indica Covarrubias, el de "maestros". Esta interpretación tendría perfecto sentido, pues los ataques que recibió en su juventud, a que alude Sahagún desde su vejez, se debe referir, como también cree Nicolau D'Olwer (1952: 50), a las críticas que se le hicieron por haber redactado en lengua náhuatl, en los años de 1547 y 1555, las obras que habrían de constituir los libros sexto y duodécimo respectivamente de la HGCNE al no tener nada que ver directamente con el propósito evangelizador. De esto se hablará más adelante.
Me he detenido tal vez demasiado en este punto, porque creo que, a menos de encontrarse pruebas concluyentes, la mención del posible origen converso de Sahagún debe ser totalmente abandonada.
Según Mendieta, Sahagún "siendo estudiante en Salamanca, tomó el hábito de religión en el convento de S. Francisco de aquella ciudad." (1971: 663). Nada se sabe tampoco sobre las fechas de entrada en la Universidad o en la Orden, ni cuáles pudieron ser sus estudios. Garibay (1975: 12) sugiere que lo haría entre los doce y catorce años en la Universidad, y entre los dieciséis y dieciocho en la Orden; por su parte Ballesteros Gaibrois (1973: 34-35) da la edad de veinte años para la entrada en la Orden, y cree que Sahagún estudiaría en la Universidad "humanidades latinas" y el "saber teológico-escriturístico". Los esfuerzos de investigación de Vicente Castro y Rodríguez Molinero, entre otros, en la Universidad de Salamanca, desgraciadamente, no han dado fruto alguno respecto a esta cuestión. Queda todavía la posibilidad de encontrar algún documento importante en los archivos de la orden franciscana, si algún día se pueden consultar.
Bien parca es, pues, la información que se conoce hoy sobre Sahagún antes de su paso a la Nueva España, donde residiría el resto de su vida.

Fray Bartolome de las Casas: Brevisima relacion de la destruccion de las Indias.

BREVÍSIMA RELACIÓN DE LA DESTRUICIÓN DE LAS INDIAS

Descubriéronse las Indias en el año de mil y cuatrocientos y noventa y dos. Fuéronse a poblar el año siguiente de cristianos españoles, por manera que ha cuarenta e nueve años que fueron a ellas cantidad de españoles; e la primera tierra donde entraron para hecho de poblar fué la grande y felicísima isla Española, que tiene seiscientas leguas en torno. Hay otras muy grandes e infinitas islas alrededor, por todas las partes della, que todas estaban e las vimos las más pobladas e llenas de naturales gentes, indios dellas, que puede ser tierra poblada en el mundo. La tierra firme, que está de esta isla por lo más cercano docientas e cincuenta leguas, pocas más, tiene de costa de mar más de diez mil leguas descubiertas, e cada día se descubren más, todas llenas como una colmena de gentes en lo que hasta el año de cuarenta e uno se ha descubierto, que parece que puso Dios en aquellas tierras todo el golpe o la mayor cantidad de todo el linaje humano.

Todas estas universas e infinitas gentes a todo género crió Dios los más simples, sin maldades ni dobleces, obedientísimas y fidelísimas a sus señores naturales e a los cristianos a quien sirven; más humildes, más pacientes, más pacíficas e quietas, sin rencillas ni bullicios, no rijosos, no querulosos, sin rencores, sin odios, sin desear venganzas, que hay en el mundo. Son asimismo las gentes más delicadas, flacas y tiernas en complisión6 e que menos pueden sufrir trabajos y que más fácilmente mueren de cualquiera enfermedad, que ni hijos de príncipes e señores entre nosotros, criados en regalos e delicada vida, no son más delicados que ellos, aunque sean de los que entre ellos son de linaje de labradores.

Son también gentes paupérrimas y que menos poseen ni quieren poseer de bienes temporales; e por esto no soberbias, no ambiciosas, no codiciosas. Su comida es tal, que la de los sanctos padres en el desierto no parece haber sido más estrecha ni menos deleitosa ni pobre. Sus vestidos, comúnmente, son en cueros, cubiertas sus vergüenzas, e cuando mucho cúbrense con una manta de algodón, que será como vara y media o dos varas de lienzo en cuadra. Sus camas son encima de una estera, e cuando mucho, duermen en unas como redes colgadas, que en lengua de la isla Española llamaban hamacas.

Son eso mesmo de limpios e desocupados e vivos entendimientos, muy capaces e dóciles para toda buena doctrina; aptísimos para recebir nuestra sancta fee católica e ser dotados de virtuosas costumbres, e las que menos impedimientos tienen para esto, que Dios crió en el mundo. Y son tan importunas desque una vez comienzan a tener noticia de las cosas de la fee, para saberlas, y en ejercitar los sacramentos de la Iglesia y el culto divino, que digo verdad que han menester los religiosos, para sufrillos, ser dotados por Dios de don muy señalado de paciencia; e, finalmente, yo he oído decir a muchos seglares españoles de muchos años acá e muchas veces, no pudiendo negar la bondad que en ellos veen: «Cierto estas gentes eran las más bienaventuradas del mundo si solamente conocieran a Dios.»

En estas ovejas mansas, y de las calidades susodichas por su Hacedor y Criador así dotadas, entraron los españoles, desde luego que las conocieron, como lobos e tigres y leones cruelísimos de muchos días hambrientos. Y otra cosa no han hecho de cuarenta años a esta parte, hasta hoy, e hoy en este día lo hacen, sino despedazarlas, matarlas, angustiarlas, afligirlas, atormentarlas y destruirlas por las extrañas y nuevas e varias e nunca otras tales vistas ni leídas ni oídas maneras de crueldad, de las cuales algunas pocas abajo se dirán, en tanto grado, que habiendo en la isla Española sobre tres cuentos de ánimas que vimos, no hay hoy de los naturales de ella docientas personas. La isla de Cuba es cuasi tan luenga como desde Valladolid a Roma; está hoy cuasi toda despoblada. La isla de Sant Juan e la de Jamaica, islas muy grandes e muy felices e graciosas, ambas están asoladas. Las islas de los Lucayos, que están comarcanas a la Española y a Cuba por la parte del Norte, que son más de sesenta con las que llamaban de Gigantes e otras islas grandes e chicas, e que la peor dellas es más fértil e graciosa que la huerta del rey de Sevilla, e la más sana tierra del mundo, en las cuales había más de quinientas mil ánimas, no hay hoy una sola criatura. Todas las mataron trayéndolas e por traellas a la isla Española, después que veían que se les acababan los naturales della. Andando en navío tres años a rebuscar por ellas la gente que había, después de haber sido vendimiadas, porque un buen cristiano se movió por piedad para los que se hallasen convertirlos e ganarlos a Cristo, no se hallaron sino once personas, las cuales yo vide. Otras más de treinta islas, que están en comarca de la isla de Sant Juan, por la misma causa están despobladas e perdidas. Serán todas estas islas, de tierra, más de dos mil leguas, que todas están despobladas e desiertas de gente.

De la gran tierra firme somos ciertos que nuestros españoles por sus crueldades y nefandas obras han despoblado y asolado y que están hoy desiertas, estando llenas de hombres racionales, más de diez reinos mayores que toda España, aunque entre Aragón y Portugal en ellos, y más tierra que hay de Sevilla a Jerusalén dos veces, que son más de dos mil leguas.

Daremos por cuenta muy cierta y verdadera que son muertas en los dichos cuarenta años por las dichas tiranías e infernales obras de los cristianos, injusta y tiránicamente, más de doce cuentos de ánimas, hombres y mujeres y niños; y en verdad que creo, sin pensar engañarme, que son más de quince cuentos.

Dos maneras generales y principales han tenido los que allá han pasado, que se llaman cristianos, en estirpar y raer de la haz de la tierra a aquellas miserandas naciones. La una, por injustas, crueles, sangrientas y tiránicas guerras. La otra, después que han muerto todos los que podrían anhelar o sospirar o pensar en libertad, o en salir de los tormentos que padecen, como son todos los señores naturales y los hombres varones (porque comúnmente no dejan en las guerras a vida sino los mozos y mujeres), oprimiéndolos con la más dura, horrible y áspera servidumbre en que jamás hombres ni bestias pudieron ser puestas. A estas dos maneras de tiranía infernal se reducen e ser resuelven o subalternan como a géneros todas las otras diversas y varias de asolar aquellas gentes, que son infinitas.

La causa por que han muerto y destruído tantas y tales e tan infinito número de ánimas los cristianos ha sido solamente por tener por su fin último el oro y henchirse de riquezas en muy breves días e subir a estados muy altos e sin proporción de sus personas (conviene a saber): por la insaciable codicia e ambición que han tenido, que ha sido mayor que en el mundo ser pudo, por ser aquellas tierras tan felices e tan ricas, e las gentes tan humildes, tan pacientes y tan fáciles a sujetarlas; a las cuales no han tenido más respecto ni dellas han hecho más cuenta ni estima (hablo con verdad por lo que sé y he visto todo el dicho tiempo), no digo que de bestias (porque pluguiera a Dios que como a bestias las hubieran tractado y estimado), pero como y menos que estiércol de las plazas. Y así han curado de sus vidas y de sus ánimas, e por esto todos los números e cuentos dichos han muerto sin fee, sin sacramentos. Y esta es una muy notoria y averiguada verdad, que todos, aunque sean los tiranos y matadores, la saben e la confiesan: que nunca los indios de todas las Indias hicieron mal alguno a cristianos, antes los tuvieron por venidos del cielo, hasta que, primero, muchas veces hubieron recebido ellos o sus vecinos muchos males, robos, muertes, violencias y vejaciones dellos mesmos.


En esta carta el Fray Bartolome de las Casas denuncia ante el rey el mal trato que los soldados han echo a los indigenas, describe el comportamiento y las malas acciones que han tenido ellos, ademas como su nombre lo dice describe la Destruccion de las Indias, dibulga que en pocos años los soldados españoles habian exterminado a todos los nativos que habitaban en la isla.
El fin de esta carta fue hacer conciencia sobre lo que hacia el ejercito y tratar de dar privilegios a los indijenas, ya que finalmente eran humanos al igual que los españoles.

Opinion Personal:
-Creo que todos y principalmente los indigenas debemos de estar eternamente agradecidos con el Fray Bartolome de las Casas, ya que gracias a el las personas hemos logrado tener privilegios y ser iguales ante todos, esta carta de relacion fue iniciativa de los derechos humanos que actualmente maneja todo el mundo

HERNAN CORTES: 5 cartas de relacion

Primera carta (10 de julio de 1519) :
 En esta carta se describe la expedicion de Francisco Hernandez Cordoba y Juan Grijalba, como antecedentes de la expedicion de Hernan Cortes, en donde se describen echos ocurridos en Cuba, Cozumel, la batalla de Centla y arribo a San Juan de Ulua.
Describen flora y fauna de sitios visitados, avisan los sacrificios humanos. Se repórta el nombramiento de Hernan Cortes como "Cpital General y Justicia Mayor", se suplica al rey no otorgar el nombramiento de Adelantado o Gobernador al teniente Diego Velasquez de Cuellar.
Esta carta fue llevada por Fransisco de Montejo al rey Carlos I


Segunda carta (30 de octubre de 1520) :
Cortes reporta el hundimiento de las naves para evitar diserciones. Ademas describe las riquezas del estado de Culua en el cual habitaban los mexicas. Se reporta la excursion mandada por Fransisco de Garay, tambien reporta la alianza con los totonacas, batallas y la alianza con los tlaxcaltecas, le informa la matanza de Cholula desde una prespectiva a su favor, ademas describe la entrada y recepcion a Tenochtitlan, describe la batalla de Nautla, el arreato de Moctezuma, tambien describe la forma de vida social de los habitantes de Tenochtitlan. Esta carta es escrita para justificar ante el rey todas sus acciones que a realizado a lo largo de su expedicion.
Termina describiendo la Matanza del Templo Mayor, La muerte de Moctezuma(la Noche Triste) y ademas hace la peticion para llamar a estos territorios la Nueva España..


Tercera carta(15 de mayo de 1522) :
Cortes recuerda la batalla de Otumba, la forma de reorganizarse, describe la construccion de los bergantines para el aslto anfibio. Se detalla la distribucion de las fuerzas militares liderada por los capitanes de Tenochtitlan.
Cortes describe su experiancia al casi perder la vida al ser capturado en una escaramuza en la ciudad de Tenochtitlan, y es salvado por Cristobal de Guzman quien mas tarde es capturado por mexicas y sacrificado.
Esta historia es finalizada por la descripcion de la toma de Tlatelolco y la captura de Cuauctemoc por Garcia Holguin(soldado español).
D e forma independiente se reporta la tercera expedicion del gobernador de Jamaica Fransico de Garay y su encuentro.


Cuarta carta (15 de octubre de 1524) :
Esta carta reporta la rendicion de Michoacan, la campaña de Zacatula y Colima, la campaña de Oaxaca, Tehuantepec y Tultepec, la segunda Campaña en rio Panuco y Chila, la expedicion de expedicion de Pedro Albarado a la campaña de Guatemala.
Cortes reporto la llegada de Juan Bono de Quejo quien portaba cartas firmadas por el Obispo de Burgos Juan de Fonseca. Solicito el envio de frailes de la Orden de San Francisco y de la Orden de Santo Domingo para la realizacion de la evangelizacion de indigenas.


Quinta carta ( 3 de septiembre de 1526) :
Confirmo la traicion de Cristobal de Olid, Cortes encabezo una expedicion Hibueras para lograr someter la rebelion. Aqui describe la dificultad para cruzar el rio de Tabasco y Chiapas en la expedicion viajaba Cuauctemoc junto con otros mexicas.Describe el encuentro con el halach uinik de los mayas que intento cambiarlo a la fe catolica .
La parte final de la carta son justificaciones acerca de las acusaciones realizadas a Cortes.


Oponion personal
-Considero que Cortes fue mas que una mala persona, un soldado afortunado y con una astucia que lo llevo a ser la persona que logro realizar sus objetivos de dominar toda la zona de lo que ahora es Mexico y parte de Guatemala y Belize, me parece que Cortes era demasiado treamposo y tambien en varias ocaciones fue un gran traidor ya que no respetaba su palabra ante varias situaciones con las que logro la dominacion de el territorio mexica.

sábado, 24 de marzo de 2012

Cristóbal Colón: "Bitácora de viaje"

"Jueves, 11 de octubre
Navegó al Oestesudoeste. Tuvieron mucha mar, más que en todo el viaje habían tenido. Vieron pardelas y un junco verde junto a la nao. Vieron los de la carabela Pinta una caña y un palo, y tomaron otro palillo labrado a lo que parecía con hierro, y un pedazo de caña y otra hierba que nace en tierra y una tablilla. Los de la carabela Niña también vieron otras señales de tierra y un palillo cargado de escaramojos. Con estas señales respiraron y se alegraron todos. Anduvieron este día, hasta puesto el sol, 27 leguas. Después de puesto el sol, navegó a su primer camino al oeste. Andarían doce millas cada hora, y hasta dos horas después de medianoche andarían 90 millas, que son 22 leguas y media. Y porque la carabela Pinta era más velera e iba delante del Almirante, halló tierra e hizo las señas que el Almirante había mandado. Esta tierra [la] vio primero un marinero que se decía Rodrigo de Triana, puesto que el Almirante, a las diez de la noche, estando en el castillo de popa, vio lumbre; aunque fue cosa tan cerrada que no quiso afirmar que fuese tierra, pero llamó a Pero Gutiérrez repostero de estrados del Rey y díjole que parecía lumbre, que mirase él, y así lo hizo, y la vio. Díjolo también a Rodrigo Sánchez de Segovia, que el Rey y la Reina enviaban en la armada como veedor, el cual no vio nada porque no estaba en lugar adonde la pudiese ver. Después que el Almirante lo dijo, se vio una vez o dos, y era como una candelilla de cera que se alzaba y levantaba, lo cual a pocos pareciera ser indicio de tierra. Por lo cual, cuando dijeron la Salve, que la acostumbran decir y cantar a su manera todos los marineros y se hallan todos, rogó y los amonestó el Almirante que hiciesen buena guarda del castillo de proa, y mirasen bien por la tierra, y que al que le dijese primero que veía tierra le daría luego un jubón de seda, [aparte de] las otras mercedes que los Reyes habían prometido, que eran diez mil maravedís de juro a quien primero la viese. A las dos horas después de media noche apareció la tierra, de la cual estarían dos leguas. Amainaron todas las velas, y quedaron con el treo que es la vela grande, sin bonetas, y se pusieron a la corda, temporizando hasta el día viernes que llegaron a una isleta de los lucayos, que se llamaba en lengua de indios Guanahaní. Luego vieron gente desnuda, y el Almirante salió a tierra en la barca armada y Martín Alonso Pinzón y Vicente Yañez, su hermano, que era capitán de la Niña. Sacó el Almirante la bandera real y los capitanes con dos banderas de la Cruz Verde, que llevaba el Almirante en todos los navíos por seña, con una F y una I, encima de cada letra su corona, una de un cabo de la + y otra de otro. Puestos en tierra vieron árboles muy verdes y aguas muchas y frutas de diversas maneras. El Almirante llamó a los dos capitanes y a los demás que saltaron en tierra, y a Rodrigo de Escobedo escribano de toda la armada, y a Rodrigo Sánchez de Segovia, y dijo que le diesen por fe y testimonio cómo él por ante todos tomaba, como de hecho tomó, posesión de la dicha isla por el Rey y por la Reina sus señores, haciendo las protestaciones que se requerían, como más largo se contiene en los testimonios que allí se hicieron por escrito. Luego se juntó allí mucha gente de la isla. Esto que sigue son palabras formales del Almirante en su libro de su primera navegación y descubrimiento de estas Indias. "Yo", dice él, "porque nos tuviesen mucha amistad, porque conocí que era gente que mejor se libraría y convertiría a nuestra santa fe con amor que no por fuerza, les di a algunos de ellos unos bonetes colorados y unas cuentas de vidrio que se ponían al pescuezo, y otras cosas muchas de poco valor, con que tuvieron mucho placer y quedaron tanto nuestros que era maravilla. Los cuales después venían a las barcas de los navíos adonde estábamos, nadando, y nos traían papagayos e hilo de algodón en ovillos y azagayas y otras cosas muchas, y nos las trocaban por otra cosas que nos[otros] les dábamos, como cuentecillas de vidrio y cascabeles. En fin, todo tomaban y todo daban de aquello que tenían de buena voluntad, mas me pareció que era gente muy pobre de todo. Ellos andaban todos desnudos como su madre los parió, y también las mujeres, aunque no vi más que una, harto moza, y todos los que yo vi eran todos mancebos, que ninguno vi de edad de más de XXX años, muy bien hechos, de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras, los cabellos gruesos casi como sedas de cola de caballos y cortos. Los cabellos traen por encima de las cejas, salvo unos pocos detrás que traen largos, que jamás cortan. [Algunos] de ellos se pintan de prieto y ellos son del color de los canarios, ni negros ni blancos, y [algunos] de ellos se pintan de blanco y [otros] de ellos de colorado, y [otros] de ellos de lo que hallan; y [algunos] de ellos se pintan las caras, y otros todo el cuerpo, y otros sólo los ojos, y otros sólo la nariz. Ellos no traen armas ni la conocen, porque les mostré espadas y las tomaban por el filo y se cortaban con ignorancia. No tienen algún fierro; sus azagayas son unas varas sin fierro y algunas de ellas tienen al cabo un diente de pez, y otras de otras cosas. Ellos todos a una mano son de buena estatura de grandeza y buenos gestos, bien hechos. Yo vi algunos que tenían señales de heridas en sus cuerpos, y les hice señas qué era aquello, y ellos me mostraron cómo allí venía gente de otras islas que estaban cerca y les querían tomar y se defendían. Y yo creí y creo que aquí vienen de tierra firme a tomarlos por cautivos. Ellos deben ser buenos servidores y de buen ingenio, que veo que muy presto dicen todo lo que les decía. Y creo que ligeramente se harían cristianos, que me pareció que ninguna secta tenían. Yo, placiendo a nuestro Señor, llevaré de aquí al tiempo de mi partida seis a Vuestras Altezas para que aprendan a hablar. Ninguna bestia de ninguna manera vi, salvo papagayos de esta isla". Todas son palabras del Almirante.

Sábado, 13 de octubre
Luego que amaneció, vinieron a la playa muchos de estos hombres, todos mancebos, como dicho tengo, y todos de buena estatura, gente muy hermosa; los cabellos no crespos, sino corredíos [lacios] y gruesos como sedas de caballo, y todos de la frente y cabeza muy ancha, más que otra generación que hasta aquí haya visto; y los ojos muy hermosos y no pequeños; y ellos ninguno prieto [negro], sino del color de los canarios[...]. Las piernas muy derechas, todos a una mano, y no barriga, sin muy bien hecha. Ellos vinieron a la nao con almadías [canoas], que son hechas del pie de un árbol como un barco largo y todo de un pedazo[...]. Y yo estaba atento y trabajaba de saber si había oro, y vi que algunos de ellos traían un pedazuelo colgado en un agujero que tienen en la nariz. Y por señas pude entender que, yendo al Sur o volviendo la isla por el sur, que estaba allí un Rey que tenía grandes vasos de ello y tenía muy mucho[...]. Y esta gente es harto mansa, y por las ganas de tener de nuestras cosas, y temiendo que no se les ha de dar sin que den algo y no lo tienen, toman lo que pueden y se echan luego a nadar; mas todo lo que tienen lo dan por cualquier cosa que les den, que hasta los pedazos de las escudillas y de las tazas de vidrio rotas rescataban, hasta que vi dar 16 ovillos de algodón por tres ceotís de Portugal, que es una blanca de Castilla, y en ellos habría más de una arroba de algodón hilado. Esto defendería yo y no dejaría tomar a nadie sino que yo lo mandaría tomar todo para vuestras Altezas, si tuviera en cantidad. Aquí nace en esta isla, mas por el poco tiempo no pude dar así del todo fe. Y también aquí nace el oro que traen colgado a la nariz, mas, por no perder tiempo, quiero ir a ver si puedo topar a la isla de Cipango. Ahora como fue noche todos se fueron a tierra con sus almadías.
Domingo, 14 de octubre
...y vide un pedazo de tierra que se hace como isla, aunque no lo es, en que había seis casas, el cual se pudiera atajar en dos días por isla, aunque yo no veo ser necesario, porque esta gente es muy simple en armas, como verán Vuestras Altezas de siete que yo hice tomar para llevarlos y aprender nuestra habla y [de]volverlos, salvo que Vuestras Altezas cuando mandaren puédenlos todos llevar a Castilla o tenerlos en la misma isla cautivos, porque con cincuenta hombres los tendrán todos sojuzgados, y les harán hacer todo lo que quisieren..."

Tipos de cronistas


En el aspecto de la conquista existieron tres tipos de cronistas principalmente.

Militar: Descrbian el aspecto de la conquista desde el punto de vista de la descrpción del terreno, fuerza bruta y el territorio gobernado

Religioso o misionero: Se encargaban de conquistar con la fe e ideologia impuesta por los reyes católicos de España. También manifestaban la forma brutal y reprobable de los militares a la hora de conquistar, en cierto modo mediadores.

Indígena: Hablaban de las crueldades pasadas por los militares y las formas en como fueron conquistados, su forma de defnderse.

Aquí vemos tres tipos de cronistas los cuales narran su propia forma de ver la conquista. 

¿Qué es una crónica?

"La crónica es, en esencia, una información interpretativa y valorativa de los hechos noticiosos, actuales o actualizados, donde se narra algo al propio tiempo que se juzga lo narrado" (Martín Vivaldi, 1987, p. 123).


"La etimología de la palabra propone una idea de la crónica como el relato de los hechos tal como sucedieron por orden cronológico. Esta definición no está mal, es cierta, pero es insuficiente. Sobre todo en periodismo. En la crónica periodística esa sería sólo una de las características.
El primer modo de utilizar la crónica –género exclusivo de las lenguas derivadas del latín—fue para realizar relatos históricos, por su interesante narrativa. Posteriormente fue el modelo casi excluyente a la hora de relatar los viajes de exploración de los navegantes europeos en sus conquistas en el nuevo mundo. Finalmente, el periodismo se apropia de este género para recrear con características propias del oficio un género difícil de definir y de escribir, como es la crónica periodística.
¿Cuál es la diferencia sustancial entre la noticia y la crónica? Si bien es complejo definir la crónica periodística y sus características -- no por falta de elementos sino por su gran riqueza-- , se pueden diferenciar de modo básico en que la noticia es el relato inmediato y despojado de los hechos, cuyo valor radica en estas dos características, de modo prioritario.
En cambio, en la crónica puede mediar un tiempo—reducido-- entre lo ocurrido y la publicación y la riqueza de su corpus radica en la subjetividad que le otorga con su pluma quien la escribe.
La crónica es, en esencia, información. Puede interpretarse como la integración de los demás subgéneros periodísticos en pos del relato de un hecho pasado; pero renovado y pleno de detalles, dado que el periodista lo retoma, lo interpreta, lo interpela y lo recrea bajo la influencia de su mirada."

Contexto histórico

Comenzando con el comerciante genovés Cristóbal Colón en su arribo el 12 de octubre de 1492, comenzamos a ver que desde un principio nuestros antecedentes, aunque organizados, eran bastantes confiados ante tan absurda muestra de bondad de Colón siendo este un aprovechado de la ignorancia de nuestro pueblo antiguo porque, ciertamente, cambiar cosas inútiles de parte de este por cosas de sumo costo que se le fue otorgado era desgraciado de su parte.
En su diario de navegación menciona Colón que los tipos, según indios, eran amigables y mejor aun influenciables y por lo tanto fáciles de manipular, también menciona que eran jóvenes, hermosos, fuertes, morenos y con cabello grueso y largo.
Basandonos de la descripción de este personajes y otros que también escribieron sobre la conquista nos damos cuenta que era un pueblo sano sin enfermedades, en cierta forma organizados pero desafortunadamente ingenuos.
Citando palabras de Hernán Cortés para describir tenochtitlan para mantener el contexto de su llegada "Esta gran ciudad de Temixtitan está fundada en esta laguna salada, y desde la tierra firme hasta el cuerpo de la dicha ciudad, por cualquier parte que quisieran entrar a ella, hay dos leguas. Tiene cuatro entradas todas de calzada hechas a mano, tan ancha como dos lanzas jinetas. Es tan grande la ciudad como Sevilla y Córdoba. Todas las demás son la mitad de tierra y por la otra mitad son de agua y todas las calles de trecho a trechoestán abiertas y en todas estas aberturas hay sus puentes de muy anchas y grandes vigas."